El derecho de acceso a servicios básicos de calidad, incluido el acceso al agua, es uno de los principios del pilar europeo de derechos sociales.

La Iniciativa por el Derecho al Agua consiguió reunir 1,6 millones de firmas para mejorar el acceso al agua potable y con más seguridad en toda Europa. Por eso, en la revisión de la legislación europea presentada el 1 de febrero por la Comisión Europea se propuso la mejora de la calidad del agua potable y el acceso a ella. Dicha legislación también exigirá que se ofrezca a los ciudadanos información sobre la calidad y la seguridad del agua potable para incrementar la confianza sobre el agua del grifo.

En la práctica, esto supone la instalación del material que sea necesario para ofrecer agua potable en los espacios públicos, hacer campañas para informar a los ciudadanos sobre la calidad del agua y animar a las administraciones y edificios públicos a que ofrezcan agua potable.Con esta iniciativa también se pretende contribuir al medio ambiente, gracias a la reducción del uso de botellas de plástico. Asimismo, se prevé que los hogares europeos puedan ahorrar más de 600 millones de euros anuales.

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