Hoy os contamos un nuevo caso de mal estado del agua de consumo, concretamente en la población aragonesa de Jaca. Una avería en la potabilizadora, en concreto en la planta dosificadora de dióxido de cloro ha supuesto la modificación del producto que se usa para realizar la desinfección. Como consecuencia en olor y el sabor del agua han cambiado.
Debido a la avería, el agua ha sido tratada con hipoclorito de sodio, lo que provocado un olor y sabor más fuerte de lo habitual. A pesar de eso, tanto el dióxido de cloro como en hipoclorito de sodio son sustancias desinfectantes especialmente indicadas para tratar el agua de consumo humano, ya que cumplen con los criterios sanitarios de calidad establecidos por los organismos que se encargan del control de las aguas.
Esta alteración del agua de Jaca ha sido temporal pero evitable con un equipo de osmosis inversa en casa. La osmosis inversa ofrece agua de calidad, libre de olores fuertes y gustos desagradables, sana y sin bacterias.